La vida según Balah

Ni la actualidad, ni los sueños, ni los amigos, ni las fantasías... se ven igual detrás de unos barrotes. Balah es un hamster hembra pequeño, muy inquieta, pero con una gran capacidad de análisis de la realidad, de la actualidad, de la vida en general. Ahora tienes acceso a sus pensamientos, retoma el testigo que dejaron en su día Gnocchi y Zucco y continúa alimentando el primer blog creado por roedores en Internet...

25 octubre 2005

Regalo por el día de Internet


Felicidades! Hoy tenemos que alegrarnos todos porque es el día mundial de Internet y, al fin y al cabo, la mayoría de nosotros nos conocemos gracias a este medio!

Hoy día la Red de redes se ha metido en nuestras casas y jaulas con una facilidad tan pasmosa que nos resulta lo más normal del mundo enviar emails a nuestros amigos, leer las noticias de última hora o incluso encontrar "novio" (ay mi Pelucón) por Internet!, pero si echamos la vista atrás... hace 10 años... ¿quién sabía qué era eso de Internet?

Yo ya lo dije, estoy encantada con las nuevas tecnologías así que como hoy es nuestro día, os voy a hacer un regalito. Si queréis tenerme en vuestro ordenador mientras corro dentro de mi bola, como un icono de estos que se mueven por la pantalla mientras utilizas el word o miras cualquier tipo de página (cualquiera, sí, cualquiera, mal pensaos...), podéis encontrar un programa muy curioso para los amantes de los hamstercillos lindos como yo en la siguiente dirección http://hamster-ball-desktop-uptodown.com

En la imagen, yo en versión cibernética. Besitos!

3 Comments:

  • At 25 octubre, 2005 14:11, Anonymous Anónimo said…

    Doy fe de que por Internet se puede encontrar hasta... pareja!

     
  • At 25 octubre, 2005 14:13, Blogger Manu said…

    Siii, si yo hasta he encontrado a Pelucón (aunque últimamente ni me escribe ni nada), ¿habrá encontrado él a alguna otra "mina"? Ay que me va a dar mal de amores...

     
  • At 26 octubre, 2005 19:19, Blogger Héctor Ojeda said…

    Amores dan curiosidad, entusiasman, te dejan en la luna y también duele.

    Amorosamente.

    Héctor.

     

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